Ya son cinco meses desde que regresamos a Dubái y después de varios meses de re-adaptación, estoy lista para compartir con ustedes qué se siente regresar a Dubái después de haber vivido en México dos años. Vamos a decir que este post sería la parte II del que escribí en diciembre de 2020 titulado Regresar a México después de vivir en Dubái y que fue publicado en el periódico tapatío El Informador.
Si son nuevos aquí, les cuento rápidamente que en el 2020 y después de cinco años de vivir en Dubái, mi esposo (que es piloto aviador) perdió su trabajo por el coronavirus y nos vimos forzados a regresar a México en agosto de ese año. Ninguno de los dos queríamos volver porque amábamos nuestra vida en Dubai. Sin embargo no fuimos los únicos obligados a irnos. Al final del 2020, se reportó que alrededor de quinientas mil familias dejaron Dubái a causa del coronavirus.
Recuerdo que cuando escribí ‘Volver a México después de vivir en Dubái’ estábamos en mi casa de Guadalajara. En ese entonces llevábamos cuatro meses de haber regresado a México y no sabíamos si algún día volveríamos a Dubái. De hecho, tampoco sabíamos si nos quedaríamos permanentemente en Guadalajara o si nos mudaríamos a otra ciudad en México o incluso a otro país. Para nosotros, igual que para muchas familias, fueron meses de mucha incertidumbre.
Finalmente, nos mudamos a la ciudad de México y estuvimos ahí alrededor de nueve meses hasta que a mi esposo le ofrecieron su trabajo de regreso en Dubái. Sabíamos que eso podía pasar y no fue difícil tomar la decisión de regresar. Así que vendimos todos nuestros muebles (porque debido a la guerra entre Rusia y Ucrania, transportarlos en barco salía carísimo) y en julio del 2021 tomamos el avión de regreso a Dubái.
¿Cómo se sintió regresar a Dubái?
Sin duda fueron muchos sentimientos. Por un lado, no quería dejar la Ciudad de México en donde, para mi sorpresa, fui súper feliz. Aquí les cuento por qué me gustó tanto vivir ahí.Por otro lado, me daba mucha tristeza que Paola ya no tuviera esa cercanía con mi familia. A pesar de que ellos estaban en Guadalajara y nosotros en México, nos veíamos muy seguido y se sentían “cerquita.” Ahora entiendo por qué la gente me decía que una vez que se tienen hijos, se vuelve más difícil vivir en el extranjero.
Pero por otro lado, la vida que teníamos en Dubái era incomparable. La seguridad, la calidad de vida, el entretenimiento para niños y grandes, la calidad de la educación… en fin. La vida en Dubái, a nosotros, nos ha parecido increíble. Sé que no es para todos y que no hay punto medio – o te gusta o la odias. Pero en nuestro caso, nos gusta y nos gusta mucho. Así que volver se sintió muy familiar – como si nunca nos hubiéramos ido. Fue como haberle puesto “play” a la película después de una larga pausa.
Claro que en dos años Dubái cambió mucho y abrieron nuevos restaurantes, nuevas tiendas y nuevas atracciones, pero en general, la vida seguía igual. Volvimos a ir a los mismos súper mercados a los que íbamos; regresamos a nuestros restaurantes favoritos que afortunadamente siguieron vivos después de la pandemia; volvimos al desierto, a la playa y a los lugares que nos encantaba visitar cuando vivíamos aquí. Además, fue muy bonito reencontrarnos con nuestros amigos.
En resumen, sentimos que habíamos regresado a casa.
Como siempre, gracias por leer hasta el final ¡y no dejen de seguirme en mis redes sociales! Estoy muy feliz de estar de vuelta con ustedes en el blog.
¡Hasta la próxima!
DyP