Taxco es uno de esos pueblitos mexicanos que transportan en el tiempo. Por eso es considerado un Pueblo Mágico.

Si eres expatriado, entenderás que ir a tu país de origen puede ser frustrante. ¡Tanta gente que ver en tan poco tiempo! Aunque sin duda se disfruta muchísimo a la gente querida cuando se va, también se queda uno con ganas de pasar más tiempo con esa gente y de ver a los que faltaron.

Y bueno, muchas veces no solo te quedas con las ganas de ver a la gente que faltó, sino también de ir a lugares a los que te gustaba ir o de explorar nuevos lugares. De pronto uno se siente tan alejado de su país y su cultura, que dan unas añoranzas tremendas de dedicar unos días para conocer ese país que has dejado. Y por eso es que dedicamos dos días para conocer más de nuestro México. Literalmente de un día para otro, decidimos explorar el pueblo de Taxco, Guerrero, a tan solo dos horas y media de la Ciudad de México.

Los Pueblos Mágicos de México reciben este reconocimiento cuando el pueblo ha logrado preservar su encanto colonial. Y yo creo que esa denominación es una de las mejores ideas que se le han ocurrido a nuestro gobierno. ¿Qué mejor manera de valorar la herencia cultural de estos pueblos y ciudades que con ese título? Y más aún, ¿existe una mejor forma de incentivar el turismo que invitando a la gente a conocer un lugar mágico? En mi opinión, no.

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Así que aquí les les van seis cosas que pueden hacer en este pueblo mágico de Taxco, Guerrero:

1. Ir a la Iglesia de Santa Prisca.

Lo primero que hicimos al llegar a Taxco, fue darnos una vuelta por la Plaza y entrar a la Iglesia de Santa Prisca, la cual es una de las mayores exponentes del arte barroco novohispano en México. De hecho (dato curioso) fue durante más de cincuenta años (desde 1758 hasta 1806), el edificio más alto del país.

Taxco es el segundo centro minero más antiguo del Continente Americano, y fue hasta hace diez años, una de las zonas mineras más importantes de México. Debido a las abundantes minas de oro y plata, todos los retablos de la Iglesia de Santa Prisca están recubiertos con hoja de oro, imagínense eso… incluso, la propia Iglesia está construida sobre una mina… mina que está llena de estos metales preciosos pero que por obvias razones, jamás se podrá acceder a ellos. (Lo que es tener tanto oro y plata que no les importó tapar la mina, ¿verdad?).

El relieve montañoso de Taxco favorece que la Iglesia se alce de forma imponente sobre el resto del pueblo, vista que se puede apreciar desde varios puntos de la ciudad… y su vista es especialmente deslumbrante de noche.

Vista de la Iglesia de Santa Prisca desde el hotel en el que nos hospedamos, Hotel Boutique Pueblo Lindo

Durante la noche, los edificios coloniales más bonitos de Taxco son iluminados con luz arquitectónica, por lo que además de Pueblo Mágico, Taxco ostenta la denominación de Ciudad Luz.

Si prefieres conocer Taxco en una excursión desde la Ciudad de México, ¡te recomiendo ésta!

2. Subir al mirador del Cristo Monumental en un vocho-taxi

La mejor forma de llegar al mirador del Cristo Monumental es en un vocho-taxi. Este coche, según lo que nos dijeron los propios taxistas, es excelente para subir las empinadas calles de Taxco y además, es el único coche que puede sobrevivir a las lluvias e inundaciones durante la temporada de lluvias (aunque usted no lo crea).

Desde el mirador se tiene la mejor vista de Taxco. Desde estas alturas se puede entender por qué las calles son tan estrechas y ¡tan empinadas!

3. Comprar Plata

No se puede ir a Taxco y salir con las manos vacías. Al ser uno de los centros mineros más importantes de México, sí que conviene comprar plata aquí y admirarse por los hermosos diseños de los joyeros y artesanos mexicanos. Frente a la Plaza y en las calles circundantes, se encuentran puras tiendas que venden piezas de plata, además del Mercado de Plata, que también queda a unos minutos de la Plaza.

4. Tomarse una ‘Berta’, la bebida tradicional de Taxco.

¡Yumm! ¡Solo de pensar en una ‘Berta’ se me hace agua la boca! Y pudiera decirles que deben ir a Taxco para probarla, pero la buena noticia es que ustedes la pueden hacer en casa (aunque créanme, no les va a quedar tan rica como en Taxco). Solo necesitan mezclar muy bien miel de abeja y limón antes de agregar tequila, hielo y agua mineral. ¡Es tan rica esta bebida que es peligrosa!

Nosotros nos tomamos nuestra ‘Berta’ en el Restaurante/Bar “La Parroquia” situado justo enfrente de la Iglesia. ¡La mejor vista y la mejor bebida!

Y así terminó nuestro primer día en Taxco: tomando una ‘Berta’ mientras escuchábamos un concierto de jazz con motivo de las “Jornadas Alarconeanas”, la fiesta cultural de Taxco que dura una semana y que por suerte, nos tocó presenciar (esto fue la última semana de mayo).

5. Ir a la Casa Humboldt

Esta casa le pertenecía al representante del virreinato en Taxco y se llama “Casa Humboldt”, porque un personaje importante de la época (con ese apellido) se hospedó ahí una noche.

Ahora la casa es un museo en el que se exponen algunas piezas de arte vierreinal de Taxco y en el que se ofrecen tours por mujeres del lugar, que cabe mencionar son mujeres de la tercera edad, nacidas en Taxco y que les podrán contar historias que solo las sabe alguien que ha vivido toda su vida en este pueblo.

6. Caminar por el pueblo

Esto es un must en todos los pueblos mágicos de México (y prácticamente en cualquier ciudad del mundo), de otra manera, ¿cómo se puede apreciar la magia del lugar si no es caminar por sus callejones y plazas? Es entre estas paredes que se alberga el espíritu colonial que se ha sabido preservar a pesar de la globalización y la modernidad y que le ha valido el título de pueblo mágico a estas poblaciones. Así que una visita a un pueblo mágico sin dedicarle tiempo a explorar sus calles, sin mapa y sin prisas,, no es una visita completa a los pueblos de México.

Ahora, hay un lugar importante que nos faltó conocer, ya que fuimos en un fin de semana lluvioso: las Pozas Azules. Esta es una maravilla natural muy cerca de Taxco, que consiste en pequeñas cascadas que forman unas pozas con agua azul turquesa.

Este atractivo natural se está volviendo famoso en la región, por lo que es importante ir antes de que se vuelva un destino más turístico. Pero ojo, no vayan en los meses de temporada de lluvia, ya que la lluvia revuelve el agua de las pozas con la tierra y por lo tanto pierden su color azul turquesa.

Así que como no pudimos ir a las Pozas, decidimos visitar las grutas de Cacahuamilpa, las grutas más grandes del mundo. ¡Click aquí para leer sobre este increíble lugar!

Gracias por leerme y espero los haya convencido de que su siguiente escapada de fin de semana sea el Pueblo Mágico de Taxco, Guerrero.

¡Gracias por leerme!

DyP